XBOX ONE SCORPION    
       

Los responsables de Microsoft han dado acceso preliminar a las especificaciones y detalles de las nuevas Xbox Project Scorpio a pesar de que aún quedan varios meses para que las consolas más potentes de la historia lleguen al mercado.

En esas especificaciones hay una característica especialmente destacable: la ambición de Microsoft en el soporte de juegos nativos 4K. La potencia de todos los componentes está orientada a ese objetivo, y estamos ante un desarrollo que deja atrás a todo lo conocido, incluyendo por supuesto a la PS4 Pro.

Juegos en 4K a 60 fps, el objetivo

En esas especificaciones el primer protagonista es el procesador, que hace uso de ocho núcleos Jaguar modificados y que sobre todo funcionan a una frecuencia de reloj mayor, 2,3 GHz en lugar de los 1,75 GHz de los de la Xbox One.

Donde llegan las diferencias fundamentales en es la GPU, que forma parte de un SoC desarrollado nuevamente en colaboración con AMD y que en su procesador gráfico contará con 40 "unidades de computación personalizadas" con una frecuencia de trabajo de 1.172 MHz. La idea, ofrecer juegos nativos a 4K y a 60 fotogramas por segundo, con los títulos actuales pudiendo hacer upscaling a esa resolución.

A ese SoC le acompañan además 12 GB de memoria GDDR5 que son especialmente destacables por los 326 GB/s de ancho de banda que ofrecen: pocos cuellos de botella incluso para los juegos más exigentes. El almacenamiento está surtido con una unidad de disco duro de 1 TB de 2,5 pulgadas (nada de SSD, nos tememos) y con una unidad Blu-ray UHD como la que integraron (con mucho acierto) en las Xbox One S.